Se trata de un proyecto de ley del diputado Gustavo González (UCR) que cuenta con el apoyo del legislador del PAyS Héctor “Cacho” Bárbaro. “Con Bárbaro tenemos coincidencias en las necesidades y desafíos que afronta el agro misionero” dijo González.
Posadas. Este martes ingresó a la Legislatura un proyecto de ley del diputado provincial Gustavo González (UCR) que tiene por objetivo crear el programa de “Recuperación de plantaciones de Té del Pequeño Productor” basado en la readecuación asistida de las mismas, a través de la poda fuerte, las prácticas de manejo, el asesoramiento complementario a la poda fuerte, y la compensación de las ganancias que se dejarán de percibir en el año de poda. Según consta en el proyecto, los beneficiarios del programa serían los pequeños productores que no excedan en sus propiedades, las diez (10) hectáreas de té y las veinticinco (25) hectáreas de superficie total.
El proyecto cuenta con el acompañamiento del diputado provincial Héctor “Cacho” Bárbaro (PAyS), quién junto a González, realizaron visitas a pequeños productores de la zona centro la semana pasada. Sobre la actividad en conjunto González manifestó “con Bárbaro tenemos coincidencias en las necesidades y desafíos que afronta el agro misionero, durante el 2014 hemos acordado en varios proyectos, y este año seguramente conformaremos una agenda legislativa común. Nos une la preocupación del éxodo rural a las ciudades, creemos que el Estado debe, y puede generar los mecanismos que generen desarrollo al pequeño productor y la chacra”.
Incentivos con énfasis en la “poda fuerte” del té
Sobre los detalles del proyecto, González manifestó que “la actual y recurrente crisis de la actividad tealera demanda desde el Estado políticas inteligentes. La poda fuerte en el té es una práctica con muy buenos resultados, pero de poca aplicación en los productores en Misiones, debido a la falta de promoción, pero sobre todo, a su alto costo, y la consecuente no cosecha por una campaña”. Los especialistas en la materia indican que es recomendable realizar tres podas a las plantaciones de té; una poda anual, durante los meses del invierno; la denominada poda fuerte, casi hasta la mitad de la planta; y finalmente una poda de rebaje que se realiza aproximadamente a los treinta años.
En ese sentido, González explica que “la poda fuerte es una práctica que difícilmente se aplique en momentos de altos precios del cultivo, dado que se pierde la producción de la próxima campaña, mientras que en los malos momentos como el actual, los productores no la aplican porque no están dispuestos a invertir en un cultivo que no reditúa. A esta problemática se suma la falta de maquinarias específicas, de ahí la necesidad y oportunidad de esta política inteligente por parte del Estado, que generará competitividad en el sector tealero en el mediano plazo, y a su vez certidumbre en lo fiscal”.
Beneficios para el sector
La actividad de poda actualmente presenta un costo de $1500 a $2000 por hectárea, si la misma genera aumentos como mínimo de 1000 kilogramos de brote, a 90 centavos el kilogramo de brote en los próximos 6 años, la misma podría generar una rentabilidad (TIR) de la inversión del 39%. Para González este programa permitirá “reducir el costo de oportunidad por la producción perdida de las próximas zafras dado los bajos precios; aumentar la producción para el futuro en una forma más rápida y con menor inversión que promoviendo nuevas plantaciones; la difusión de los beneficios en todo el sector de la poda fuerte; y evitar el derroche de recursos que genera la no cosecha y el abandono de teales”.
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